UN ESTUDIO EN CANADÁ OFRECE EVIDENCIAS DEL DAÑO PARA LAS RAPACES DE LOS RODENTICIDAS
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:53h
Un equipo científico liderado por Philippe Thomas, del Ministerio de Medio Ambiente de Canadá, ha confirmado la gran toxicidad de los rodenticidas para algunas rapaces.
Para ello se han basado en el análisis de doscientas muestras de hígado de búhos americanos (Bubo virginianus) y busardos colirrojos (Buteo jamaicensis) encontrados muertos en Canadá en los últimos años.
Casi todos las muestras de los búhos analizados presentaban potentes rodenticidas como la bromadiolona, mientras que solo aparecieron en la mitad de los busardos. A partir de estos resultados, se calcula que más de un 10% de la población canadiense de búho americano corre el riesgo de intoxicarse por rodenticidas.
La bromadiolona pertenece al grupo de los llamados rodenticidas de segunda generación. Son anticoagulantes, es decir, causan hemorragias internas a la fauna que los consumen, y presentan gran persistencia dada su capacidad de acumularse en los tejidos. Este potente veneno fue utilizado en 2008 en Castilla y León contra las plagas de topillos.
Más información: Thomas, P. J. y otros autores (2011). Second generation anticoagulant rodenticides in predatory birds: Probabilistic characterisation of toxic liver concentrations and implications for predatory bird populations in Canada. Environment International, 37 (5): 914-920.