La labor de un grupo de voluntarios, apoyado por el Ayuntamiento de Castellón, ha frenado el declive de la población de chorlitejo patinegro en una zona dunar castellonense. Las medidas para paliar el impacto tanto del acceso de los bañistas como de la limpieza mecánica de la playa han sido fundamentales.
Por Gonzalo Romero y Carlos Vega
Desde hace ya más de tres años la Concejalía de Sostenibilidad y Agricultura del Ayuntamiento de Castellón, junto con el voluntariado medioambiental, se está realizando campos de trabajo y otras acciones para mejorar y proteger la interesante zona dunar existente en la playa del Serradal.
En años anteriores se eliminaron especies vegetales no autóctonas como la uña de gato (Carpobrotus edulis), planta invasora que ponía en peligro la flora de las dunas. Desde entonces se ha notado una gran mejoría, ya que las plantas autóctonas han recolonizado la zona dunar, entre ellas la azucena marítima (Pancratium maritimum).
Otra medida que se ha llevado a cabo es la colocación de líneas con el sistema palitocuerda, con el objetivo de cerrar los accesos no permitidos a la playa ya creados por los propios usuarios, que degradaban las dunas. También se utilizará esta fórmula para encauzar el paso de las personas a la playa y evitar que pisen las dunas.
Autores: Gonzalo Romero (
gonzalo.romero@castello.es) es concejal de Sostenibilidad y Agricultura del Ayuntamiento de Castellón de la Plana y Carlos Vega es coordinador del proyecto de conservación de las dunas del Serradal.