Opinión

Dudoso futuro para las hoces del Riaza

Miércoles 22 de octubre de 2014
Coincidiendo con el treinta aniversario de su famoso Refugio de Rapaces, las hoces
segovianas del río Riaza han sido declaradas Parque Natural. Pero la prevista apertura
a los visitantes de sectores muy frágiles y valiosos puede echar por tierra el buen
estado de conservación de este lugar de culto para los naturalistas españoles.


El Refugio de Rapaces de las Hoces del Riaza –en realidad, dos refugios limítrofes, el de Montejo y el del embalse de Linares, administrados por WWF/Adena y la Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), respectivamente– acaba de cumplir treinta años. Fue inaugurado el 13 de enero de 1975 por el entonces príncipe Juan Carlos, junto con el príncipe Bernardo de Holanda, recientemente fallecido y que en aquellas fechas era presidente del WWF.

A propuesta por Félix Rodríguez de la Fuente, este gran cañón fluvial del noreste de la provincia de Segovia se convirtió en uno de los primeros espacios protegidos españoles. Desde entonces se ha consolidado como un modelo de gestión y uso público, que le ha llevado a protagonizar “una de las historias más bellas del conservacionismo europeo”, en palabras de Alejandro Sánchez, director de SEO/
BirdLife.