Miércoles 22 de octubre de 2014
Parecía una misión imposible, pero ha sido todo un éxito. Se trataba de convertir un campo de tiro y varios terrenos agrícolas abandonados en un nuevo humedal aledaño a los embalses de El Hondo. Además, en la provincia de Alicante, donde escasea el agua y la evaporación es muy intensa. Sin embargo, en el año 2002 las cercetas pardillas (Marmaronetta angustirostris), una de las anátidas más escasas y amenazadas de nuestra fauna, empezaron a recalar en las nuevas lagunas de El Rincón y en 2004 crió allí la primera pareja. Los biólogos José Luis Echevarrías, adscrito al servicio de Conservación de la Biodiversidad de la Consejería de Territorio y Vivienda de la Generalitat Valenciana, y Santos Cirujano, experto en plantas acuáticas del Real Jardín Botánico de Madrid, nos relatan sus esfuerzos para favorecer a una especie, como la cerceta pardilla, considerada “En Peligro Crítico”.
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