Miércoles 22 de octubre de 2014
El vencejo moro es una especie africana que se ha
incorporado recientemente a nuestra avifauna,
quizá beneficiada por el cambio climático.
Ha criado en Andalucía y, al permanecer
en la Península durante todo el año, puede
considerarse ya un ave sedentaria.
El vencejo moro (Apus affinis) es de tamaño similar a los aviones comunes (Delichon urbica) que crían en nuestros pueblos y ciudades. Tiene una mancha blanca muy limpia y patente en el obispillo, peculiaridad que permite incluirle en el grupo de los denominados “vencejos culiblancos”.
La especie, que se distribuye por el noroeste de África, el Sahara y el suroeste de Asia (1), se encuentra actualmente en expansión en países como Marruecos, Túnez y Argelia (2), llegando hasta el estrecho de Gibraltar por la vertiente africana. Sus poblaciones han aumentado por su adaptación a criar cerca del hombre, ya que utiliza los soportes artificiales de edificios y viviendas.
Desde sus cuarteles africanos, el vencejo moro dio el salto a Europa y la subespecie A.a. galilejensis empezó a reproducirse en Turquía en el año 1971. Posteriormente, su expansión por el continente europeo quedó reflejada en citas procedentes de países tan variados como Malta, Chipre, Grecia, Italia, España, Portugal, Francia, Gran Bretaña, Irlanda, Alemania y Suecia.
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