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Se acaba el tiempo para que la laguna de Meco se proteja

Ante los planes de urbanizar el terreno que ocupa este humedal madrileño

Miércoles 22 de octubre de 2014
La aparición espontánea hace pocos años de un humedal somero y estacional como la laguna de Meco ha brindado a la Comunidad de Madrid de un lugar frecuentado por aves poco habituales en la región, como los limícolas. Su protección legal frenaría los planes de dedicar los terrenos donde se asienta a usos urbanístico e industriales.

Cristian Pérez-Granados, Eva Serrano-Davies y Víctor Noguerales


La laguna de Meco, en el término municipal homónimo, emergió en 2007 tras iniciarse las obras de la autopista Radial 2 y del polígono industrial donde ahora se ubica el centro logístico de la empresa Inditex. Muy cerca se alza el complejo penitenciario de Alcalá-Meco.

El socavón dejado tras la extracción de las gravas utilizadas durante las obras se fue llenando paulatinamente como consecuencia de las precipitaciones, el afloramiento del nivel freático y las aguas pluviales de las naves de Inditex.

La profundidad media de la masa de agua, alrededor de cuarenta centímetros, hace de dicho humedal un paraíso para las aves acuáticas (ver Quercus 303, págs 45 a 47).


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