Miércoles 22 de octubre de 2014
El plan de cuenca del Guadiana es el peor de los tramitados hasta ahora: condena a las Tablas de Daimiel y asfixia aún más al río Tajo.
por Santiago Martín Barajas y Miguel Ángel Hernández
La sesión del Consejo Nacional del Agua celebrada 13 de diciembre tuvo entre sus puntos del orden del día la aprobación de cuatro planes hidrológicos, entre ellos el del Guadiana.
Un plan este que resultaba clave para afrontar la definitiva solución a la sobre-explotación de los acuíferos de la Mancha occidental, para recuperar las Tablas de Daimiel y las lagunas de Ruidera y para reducir las presiones trasvasistas sobre el río Tajo.