Miércoles 22 de octubre de 2014
En las primeras semanas de junio, los campos de buena parte de la península Ibérica y los jardines de nuestras ciudades, especialmente los de Madrid, Ciudad Real
y Salamanca, se vieron invadidos por un increíble número de polillas. ¿De dónde venían estas criaturas y cuál era la razón
de su súbita abundancia?
por Arturo Valledor de Lozoya
LA PROLIFERACIÓN ESTE AÑO de polillas gamma (Autographa gamma o Plusia ga-mma, como la llamó Linneo), se ha debido, como ya ocurrió en 1996, a unas condiciones óptimas para el desarrollo de sus larvas, las cuales, debido a las intensas lluvias, han encontrado al eclosionar una gran cantidad de plantas verdes disponibles. Esta situación también ha beneficiado a otros noctuidos como las catocalas, fáciles de identificar por sus alas posteriores rojizas o anaranjadas con dos rebordes concéntricos negruzcos.
El mayor peligro está en la segunda generación, cuyas orugas podrían causar daños en las plantaciones de países europeos más septentrionales. En España, las gamma han estado libando, preparando su viaje de bodas y polinizando las plantas que podrían ser destruidas por su descendencia. No transmiten ninguna enfermedad ni contaminan los alimentos, cosa que, en cambio, sí pueden hacer los insecticidas usados para combatirlas, aparte de los daños ecológicos que causan al destruir otros insectos que sirven de alimento a multitud de vertebrados.
La familia Noctuidae agrupa a un gran número de especies de mariposas nocturnas, falenas o polillas nada fáciles de distinguir unas de otras, ya que sus alas anteriores tienen siempre diseños cromáticos crípticos que las confunden a la perfección con las cortezas de los árboles y arbustos donde suelen posarse para descansar. El rasgo más característico de la gamma es el pequeño dibujo en forma de dicha letra griega que se encuentra en sus alas anteriores y cuyo blanco plateado contrasta con los intrincados motivos pardos y grises que forman el color de fondo. Las alas posteriores son de un marrón más claro, con un ancho reborde oscuro. La envergadura alar es de 3 a 4’5 centímetros. Otra característica de las gamma es la presencia en la parte delantera del tórax de unos mechones de pelos densos e hirsutos que, cuando están posadas, aumentan su parecido con una corteza ligeramente levantada.
PIE DE FOTO:
Polillas gamma (Autographa gamma) en cópula sobre un majuelo (Crataegus monogyna). Foto: Sue Robinson / Shutterstock.