Miércoles 22 de octubre de 2014
Los miembros de un grupo están sujetos a distintas interacciones,
unas cooperativas y otras antagonistas. Una serie de experimentos publicados en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences plantea el canibalismo como un estímulo para no dejar de caminar en aquellos animales que se comportan como plagas.
Salvador Herrando Pérez
salvador.herrando-perez@adelaide.edu.au
El comportamientoEl grillo mormón (Anabrus simplex) es un ortóptero del oeste árido norteamericano que se encuadra en la familia Tettigonidae, compuesta por más de 6.000 especies. Los entomólogos lo incluyen entre los llamados cátidos (largas antenas y pies con cuatro segmentos), ya que no es un saltamontes (antenas cortas) ni tampoco un grillo (pies con tres segmentos).
Muchas poblaciones de grillo mormón persisten en baja densidad, pero otras forman enjambres de millones de individuos que avanzan en frentes de más de diez kilómetros de longitud. De hecho, estos grillos son de color verde o morado en las poblaciones dispersas, pero se tiñen de marrón o granate en las poblaciones gregarias. Aunque se ha comprobado que esa variabilidad tiene un componente genético (polimorfismo), también responde a un estímulo ambiental (polifenismo), que en este caso consiste en estar junto a otros muchos ejemplares de su propia especie (1). El hecho es que los individuos gregarios parecen adoptar una “decisión consensuada” (2), es decir, caminar juntos en una sola dirección y en el mismo momento del año.
Los experimentos y los resultadosEl investigador británico Steve Simpson (3) estudió el comportamiento trófico de una marea de grillos mormones en el Pastizal de Curlew (Idaho, Estados Unidos). Estos grillos no devastan el hábitat, sino que consumen selectivamente el alimento proteico disponible: semillas en inflorescencias y vainas, hojas de legumbres ricas en nitrógeno, animales muertos y excrementos de mamíferos. Pero el comportamiento más llamativo es, sin duda, que los grillos canibalizan a sus compañeros de travesía (sanos, heridos, muertos y exuvias). Simpson plantea varios experimentos para explicar el porqué.
Pie de foto:
Arriba, banda de grillos mormones avanzando sobre un camino entre la vegetación árida del Parque Nacional del Dinosaurio (Utah, Estados Unidos); debajo, escena de canibalismo. Cuando una marea de grillos atraviesa una carretera provoca escenas dantescas: los coches aplastan muchos animales y más grillos se congregan allí para devorar los cadáveres acumulados. Semejante vorágine llega a plantear problemas al tráfico rodado debido al riesgo de deslizamientos (fotos: Greg Sword y Steve Simpson).