A los veinte años de su creación, el Programa Antídoto pone el foco en asuntos como las autorizaciones para usar bromadiolona contra el topillo en Castilla y León o la relajación en la lucha contra los cebos envenenados por parte de las administraciones.
El continuismo de la Consejería de Agricultura y Ganadería de la Junta de Castilla y León a la hora de promover y autorizar la aplicación de un veneno rodenticida como la bromadiolona para atajar las explosiones demográficas de topillo campesino en zonas agrícolas ha merecido el rechazo del Programa Antídoto.
Las ONG que forman esta plataforma reivindicativa revisaron la situación de las iniciativas judiciales que el Programa Antídoto está llevando a cabo ante el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León y recordaron que la citada consejería sigue sin aportar los informes solicitados por el juzgado sobre los métodos empleados para declarar la existencia de plaga de topillo.
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