El oeste de la provincia de Salamanca se ha puesto en pie de guerra contra una empresa minera que pretende abrir minas de uranio a cielo abierto cerca de la frontera portuguesa. Los próximos meses serán decisivos para impedir un destrozo medioambiental irreversible en una zona de alto valor ecológico.
Por José Ramón Barrueco
Como ya saben los lectores de esta revista, Berkeley Minera España, filial de una empresa de matriz australiana, tiene distintos permisos de exploración o investigación, además de una concesión minera, en los municipios salmantinos de Retortillo y Villavieja de Yeltes para explotar el mineral de uranio (Quercus 361, págs. 68 y 69).
En Retortillo la empresa minera tiene previsto además construir una planta de concentrados para poder comercializar el uranio extraído en las distintas minas proyectadas en el oeste de la provincia de Salamanca.
La minería de uranio es muy destructiva con el medio ambiente, pues se hace necesario remover muchas toneladas de rocas para conseguir un kilo de uranio. En el caso de la mina salmantina se vallarán casi treinta kilómetros lineales, que englobarán las 2.500 hectáreas afectadas por la concesión minera.
Autor: José Ramón Barrueco es secretario y portavoz de la Plataforma Stop Uranio (stopuranio@gmail.com ).