Gracias al proyecto AQUILA a-LIFE, apoyado por la Unión Europea y coordinado por Grefa, ha criado por primera vez en la Comunidad de Madrid una pareja reintroducida de águila de Bonelli. Se trata de la hembra Haza y el macho Bélmez, que cuidan por estas fechas a dos pollos tras varios años intentando criar.
Por Ernesto Álvarez, Manuel Galán y Juan José Iglesias
Dos pollos de águila de Bonelli o águila perdicera (Aquila fasciata) han nacido a principios del pasado abril en la Sierra Oeste de Madrid, en un nido regentado por una pareja reproductora de la especie en la que tanto la hembra (Haza) como el macho (Bélmez) son aves reintroducidas.
Estos recientes nacimientos representan todo un hito para el proyecto AQUILA a-LIFE, coordinado por la ONG conservacionista Grefa.
Este proyecto, que está apoyado económicamente por la Unión Europea (UE), tiene como objetivo recuperar las poblaciones de una especie amenazada como el águila de Bonelli. Para ello se están liberando ejemplares en diversas zonas españolas y en la isla italiana de Cerdeña.
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