Un estudio llevado a cabo por investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) asegura que una gestión extensiva del barbecho podría reconciliar la agricultura con la conservación de la avifauna que habita en ambientes agrícolas.
El estudio, publicado en la revista Journal of Applied Ecology, sugiere que la promoción de tierras en barbecho, clave para las especies de aves agrarias, que llevan décadas sufriendo un fuerte declive, debe realizarse mediante un ambicioso sistema de incentivos medioambientales a los agricultores en el marco de la próxima Política Agraria Común (PAC) de la Unión Europea.
Desde la segunda mitad del siglo XX, las aves que habitan en los medios agrarios han sufrido fuertes declives en Europa a causa de la intensificación de las prácticas agrícolas. Estas tendencias poblacionales negativas están vinculadas a la pérdida de zonas de vegetación seminatural, particularmente a la disminución de los barbechos, terrenos de labor que se dejan sin sembrar periódicamente para que se recuperen los nutrientes del suelo.
Según los investigadores, las sucesivas reformas de la PAC han contribuido a la progresiva desaparición de los barbechos. A partir de 2010, la superficie de tierra agrícola en barbecho sufrió una acusada reducción en distintos países de la Unión Europea cuando se eliminó de la PAC la obligatoriedad de mantener una fracción de la tierra arable en barbecho. En 2014, la PAC quiso aumentar su compromiso medioambiental impulsando una nueva figura llamada “pago verde”, consistente en una serie de medidas para proteger el medio ambiente y su biodiversidad.
“Una de las medidas de este pago verde era la obligatoriedad de mantener un 5% de la superficie agrícola como superficie de interés ecológico para promover la biodiversidad. Entre estas se encontraba como opción dejar la tierra en barbecho, recuperando de esta manera la protección de este uso del suelo clave para muchas aves agrarias. Sin embargo, los agricultores prefirieron optar por otras opciones productivas, como los cultivos fijadores de nitrógeno o los cultivos intermedios”, explica la investigadora Rocío Tarjuelo, que trabaja en el Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (un centro mixto del CSIC, la Universidad de Castilla-La Mancha y la Junta de Comunidades de Castilla La-Mancha).
Apostar por la biodiversidad
Los incentivos de la PAC en medidas de protección de la biodiversidad han resultado, destaca el artículo, “insuficientes” para hacer más atractivas a ojos de los agricultores las superficies de interés ecológico más interesantes desde el punto de vista de la conservación.
“La nueva PAC, que actualmente está siendo debatida entre la Comisión Europea y los Estados Miembro, debe apostar con mayor firmeza por promover las medidas más eficaces para la protección de la biodiversidad teniendo en cuenta cuáles son los intereses de los agricultores. En este sentido, proponemos que la nueva PAC proteja los barbechos para la biodiversidad dentro de la condicionalidad y que promueva una gestión extensiva de los mismos a través de pagos a los agricultores financiados con los nuevos ecoesquemas”, resalta Tarjuelo.
ARTÍCULO DE REFERENCIA
Tarjuelo, R.; Margalida, A. y Mougeot, F. (2020). Changing the fallow paradigm: A win–win strategy for the post‐2020 Common Agricultural Policy to halt farmland bird declines. Journal of Applied Ecology. DOI: 10.1111/1365-2664.13570
https://besjournals.onlinelibrary.wiley.com/doi/abs/10.1111/1365-2664.13570