La información, fruto del esfuerzo de más de mil voluntarios que salen cada primavera a contar pájaros, es un claro indicador sobre el impacto del ser humano sobre la biodiversidad: el 37% de las aves comunes, incluyendo especies tan conocidas como la perdiz (Alectoris rufa) o la golondrina común (Hirundo rustica), se encuentra en una situación de conservación desfavorable. Más del 60% de estas especies muestra descenso poblacional desde 1998 superior al 30%.
"A priori, se trata de una tendencia que obliga a las administraciones públicas a incluirlas en categorías de amenaza a escala estatal y regional, lo que implica la elaboración de sus planes de gestión correspondientes para encauzar la mejora de su estado de conservación", indica SEO/BirdLife.
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http://seo.org/sacre
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