Teniendo en cuenta los puntos de agua artificiales que hay distribuidos por toda la geografía española, se hace imposible calcular el número de animales que mueren cada año ahogados o atrapados en balsas de riego, canales, embalses, pozos, zanjas, aljibes y abrevaderos. El problema se agrava en período estival y en las zonas áridas, cuando las charcas se secan y los animales en su desesperación por encontrar agua se acercan a estas estructuras, quedando condenados a morir ahogados.
Según la Plataforma Stop Ahogamientos, recientemente creada, el problema se solucionaría con rampas de salida, mallas, vallas, islas flotantes, escaleras e incluso parches de tela asfáltica rodeando los puntos de agua peligrosos para la fauna. Todos estos sistemas son fáciles de instalar, económicos y la mayoría ya han sido probados con éxito. Sin embargo, la falta de compromiso por parte de las administraciones frente a esta amenaza para la biodiversidad ha sido el detonante de la puesta en marcha de la plataforma, que está recopilando ejemplos en toda España de estas trampas para la fauna, con el fin de elaborar un informe para la Fiscalía de Medio Ambiente.
Otros objetivos de la Plataforma Stop Ahogamientos son concienciar del problema, impulsar denuncias y escritos destinados a las administraciones, informar acerca de los dispositivos de escape de fauna que existen disponibles y ofrecer pautas y protocolos para saber qué hacer en caso de encontrarnos con animales en peligro o ahogados en las diferentes estructuras. La Plataforma Stop Ahogamientos agradece el envío de información y documentación gráfica sobre estas estructuras artificiales peligrosas para la fauna.
Contacto:
stopahogamientos@gmail.com
Facebook:
https://bit.ly/35MHl6L
Petición online:
http://chng.it/XDJCZSt8