El Tribunal de Justicia de la Unión Europea ha condenado a Eslovaquia por aplicar medidas de gestión forestal perjudiciales para el urogallo en zonas protegidas por la Red Natura 2000. Esta sentencia cobra un especial significado ante las amenazas que gravitan sobre las zonas en las que sobreviven las últimas poblaciones cantábricas de urogallo.
Por Javier Durá
El objetivo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), con sede en Luxemburgo, es garantizar que los Estados miembros cumplen la legislación de la UE y que esta normativa se aplica de igual manera en cada ámbito estatal.
Sus decisiones, por lo tanto, determinan en gran parte la aplicación efectiva y uniforme de la legislación comunitaria, incluida la que está dedicada a la conservación de la naturaleza y la defensa del medio ambiente.
Las decisiones del TJUE pueden tener su origen en el planteamiento de una cuestión de prejudicialidad por parte de un tribunal perteneciente a cualquier Estado miembro o directamente a través de la propia Comisión Europea, ante el conocimiento de una situación de incumplimiento de la normativa de la UE.
AUTOR
Carlos Javier Durá Alemañ (cjavierdura@gmail. com) es en la actualidad investigador del Centro Internacional de Estudios en Derecho Ambiental (CIEDA), organismo con sede en Soria, donde trabaja sobre las relaciones entre el derecho y la biodiversidad y sus aplicaciones en la conservación de la naturaleza.
Enlace a la sentencia
https://bit.ly/3vNb6yb