Tres parques eólicos de Galicia han merecido recientemente sendos pronunciamientos judiciales en contra. Para uno de ellos, Oribio, en la provincia de Lugo, supone su anulación definitiva, mientras que los otros dos, Campelo y Bustelo, en la provincia de A Coruña, han sido suspendidos cautelarmente. En ambos casos, los recursos presentados en su día por los grupos ecologistas han sido decisivos.
Por José Antonio Montero
La Asociación para a Defensa Ecolóxica de Galiza (Adega), la Sociedade Galega de Ornitoloxía (SGO) y la Fundación Oso Pardo (FOP) han celebrado la sentencia del Tribunal Supremo emitida el pasado 22 de septiembre, que confirma la nulidad de la autorización del parque eólico de Oribio (Lugo) otorgada en 2019.
El alto tribunal pone fin así a los intentos de la Xunta de Galicia por salvar el proyecto, promovido por la empresa Fergo Vento en la Serra do Oribio. Con ello da la razón a las tres organizaciones conservacionistas que impugnaron la autorización en primera instancia, argumentando que el parque eólico no era compatible con la conservación de este espacio natural incluido en la Red Natura 2000 de la Unión Europea.
En un principio las obras ya habían sido paralizadas cautelarmente por la justicia en 2019 al no contar con la documentación reglamentaria.
La empresa promotora y la Xunta de Galicia presentaron un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, una vez que el Tribunal Superior de Justicia de Galicia había dado la razón a las organizaciones conservacionistas. El proceso concluye ahora con un nuevo espaldarazo de la justicia a la conservación de la Serra do Oribio.
A juicio de la representación letrada de las organizaciones conservacionistas, “en la práctica se hace inviable retomar la tramitación del parque eólico Oribio”. Las entidades recurrentes solicitarán la restauración de las zonas afectadas por las obras.
La Serra do Oribio se sitúa entre los municipios de Triacastela y Samos, en la provincia de Lugo, constituyendo la estribación más septentrional del espacio natural del Courel. Además de su protección por la Red Natura 2000 está incluida en una Reserva de la Biosfera. Es una zona de presencia reciente de oso pardo (Ursus arctos).
Un éxito del FDJCC
Por otra parte, el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, por medio de autos fechados los pasados 19 de septiembre y 6 de octubre, ha paralizado cautelarmente los proyectos de parques eólicos de Campelo y Bustelo, en la provincia de A Coruña.
La autorización y declaración de utilidad pública de estos proyectos, otorgadas por parte de la Xunta de Galicia en junio y noviembre de 2021, fueron recurridas en vía contencioso administrativa por Adega y la Plataforma por la Defensa de la Cordillera Cantábrica (PDCC).
Estos proyectos eólicos, ubicados en los municipios gallegos de Coristanco, Santa Comba y Carballos, están promovidos por la empresa Greenalia.
Los autos judiciales que los paralizan cautelarmente constituyen el primer éxito del Fondo para la Defensa Jurídica de la Cordillera Cantábrica (FDJCC). Seis entidades conservacionistas de Galicia, Asturias, Castilla y León y Cantabria lanzaron el año pasado el FDJCC para iniciar acciones jurídicas en la defensa del territorio frente a la invasión eólica (ver Quercus 425, pág. 44).
Más información
Sentencia del Tribunal Supremo sobre el parque eólico de Oribio, en https://bit.ly/3g158of
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