Editorial

Firmas reconocidas

Lunes 02 de enero de 2023

Han sido muchos los colaboradores fijos de Quercus que han contribuido con su sabiduría al prestigio de esta revista. También a su larga trayectoria, superior ya a los cuarenta años de existencia. Los diversos avatares por los que ha atravesado a lo largo de esas cuatro décadas han hecho de ella algo muy especial. Una rareza, una reliquia, un milagro. Es como el último eslabón de una cadena evolutiva: no debería estar allí, pero el hecho es que está. Contra todo pronóstico.

La nómina de firmantes sería larga y honorable. Muchas de sus secciones acabaron recopiladas en forma de libro, una segunda oportunidad de difusión que siempre hemos apoyado en aras de contribuir a conservar la biodiversidad. Por ceñirnos a los que están ahora mismo en activo, el más veterano quizá sea Santos Casado con su Natural Historia. El cual, por cierto, prologa el libro Los pioneros de Doñana que reseñamos en este mismo número de Quercus (pág. 66). No le va a la zaga Joan Mayol con su Conservando que es gerundio (uno de los pocos gerundios que no extirpamos los editores). Joan, por cierto, ha sido galardonado con el Premio Francisco Bernis en el vigesimoquinto Congreso Español de Ornitología organizado por SEO/BirdLife en Menorca el pasado mes de noviembre. Cómo no incluir aquí a Alejandro Martínez-Abraín, nuestro detective ecológico, espíritu inquieto que también publica en esta revista (pág. 74) y que aparece en meses alternos con su nueva sección Filosofía Natural. Javier Barbadillo quizá supere en veteranía a Santos Casado, ya que su vinculación a Quercus se remonta al papel ejercido como coordinador del Observatorio. Ahora nos ilustra sobre el paisaje y sus diversas formas de apreciarlo e interpretarlo. Muchos años lleva también Ramón Gómez defendiendo a las humildes plantas ruderales en Hierbas Comunes. Lo mismo que Salvador Herrando con su escrutinio de lo que publican las revistas científicas y que ahora canaliza a través de Cambio Global. No sería correcto concluir este elenco sin destacar la figura de Luis Alcalá, que se ha echado encima la responsabilidad de surtir de contenidos la sección de Paleontología. De forma menos asidua, aunque no por falta de material, sino de espacio físico, contamos con autores del calibre de Juan Jiménez o Jordi Muntaner, entre otros, para los que hemos creado una sección sin periodicidad fija titulada Firma Invitada.

Todos ellos dotan a esta veterana revista de un bien preciadísimo y hoy ninguneado por el tráfago arrollador de las redes sociales: el concepto de “autoridad” en su sentido más noble, el que alude a la auctoritas latina, que es el de las voces autorizadas, reconocidas y fiables. Con tan fieles colaboradores hemos querido construir un corpus, por seguir con los latinajos, que oriente a lectores, pero sobre todo a gestores, sobre los mejores caminos que debe recorrer la conservación, y que no suelen ser los más trillados. La ciencia no avanza, ni tampoco la sociedad, sin la participación de estos iconoclastas. En cualquiera de los formatos de Quercus, ya sean analógicos o digitales, siempre tendrán una plataforma para divulgar sus disolventes ideas, no basadas en la imaginación o los deseos, sino en su más leal saber y entender. Perdón si, en los apuros de las fechas de cierre, hemos dejado sin mencionar a algún amigo y colaborador.