Por Carlos Neto de Carvalho, Fernando Muñiz, Zain Belaústegui y José María Galán
Doñana, hace 151.000 años. La primavera está llegando a su fin. Amanece. La noche ha sido fría y húmeda, un espeso manto de niebla cubre la costa. La familia de neandertales busca el calor corporal para conseguir el consuelo que las hogueras, ya casi apagadas, no pueden proporcionarles. Pernoctan en su campamexnto eventual, junto a un denso bosque de coníferas, en el borde de la duna de arena que rodea una de las muchas lagunas de agua dulce que abundan por el entorno. En los últimos días, habían estado siguiendo las orillas de un gran río (hoy el Guadalquivir) mientras recolectaban los guijarros que les permitirán tallar las herramientas con las que procesar los alimentos más tarde. Llegaron desde el Este, por la región costera más austral del continente.
Los grandes herbívoros se desplazan desde los bosques hacia las lagunas de la antigua Doñana, buscando agua y alimento. Durante toda la noche, la familia neandertal se mostró inquieta por el incesante chapoteo y la actividad a orillas de la laguna. Los mugidos de las manadas de uros (Bos primigenius), el gruñir de los jabalíes hozando la tierra y, especialmente, el crujir de los troncos al ser pisoteados por los imponentes elefantes de colmillos rectos (Palaeoloxodon antiquus), son la razón principal de la presencia de neandertales en ese lugar y en aquella época precisa del año.
AUTORES:
Carlos Neto de Carvalho es investigador y coordinador científico del Geopark Naturtejo Mundial de la UNESCO, en Portugal. Fernando Muñiz Guinea es profesor en el Departamento de Cristalografía, Mineralogía y Química Agrícola de la Universidad de Sevilla. Zain Belaústegui Barahona es profesor en el Departamento de Dinámica de la Tierra y del Océano de la Universidad de Barcelona. José María Galán Martín es un rastreador profesional con experiencia adquirida entre tribus africanas. Los cuatro han estudiado las interacciones organismo-sustrato y forman parte del equipo que lleva descubriendo y valorando nuevos yacimientos icnológicos del Cuaternario peninsular a lo largo de las dos últimas décadas.
Dirección de contacto:
Carlos Neto de Carvalho
Geopark Naturtejo Mundial da UNESCO
Correo electrónico: carlos.praedichnia@gmail.com