Un proyecto impulsado en España por Mariano de la Paz Graells
Carne y lana para el pueblo: la aclimatación de
fauna útil en
el siglo XIX
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:53h
La reproducción de las llamas (Lama glama) fue uno de los logros que mayores alegrías dio a la delegación española de la Sociedad Zoológica de Aclimatación. Madrid albergó el mayor número de cabezas de esta especie en toda Europa.
Antonio Sánchez Pozuelo probablemente fuera el primer español que probó la carne de emú (Dromaius novaehollandiae). El despiece de esta gran ave corredora australiana empieza a resultar familiar hoy en supermercados y restaurantes, pero en 1853, fecha de esa primera degustación, la especie era escasamente conocida en Europa y aventurarse a catar su carne constituía todo un desafío gastronómico. Ese año, el entonces taxidermista del Museo de Ciencias Naturales de Madrid se las vio con los cadáveres de dos jóvenes emúes muertos en la Casa de Fieras. Además de incluir sus pieles y osamentas en las colecciones del museo, Sánchez Pozuelo aprovechó la ocasión para procurarse una ración extra de carne roja y entrar, sin saberlo, en el anecdotario culinario nacional. Mariano de la Paz Graells (1809-1898), director del museo madrileño durante buena parte del siglo XIX, narra el episodio en una de sus colaboraciones en los boletines de la Sociedad Zoológica de Aclimatación, asociación francesa de la que él era delegado en España. El objetivo central de su escrito era comunicar que de los errores se aprende y que, con tesón y profesionalidad, una mala nueva puede ser, simplemente, el preludio del éxito. La pareja pionera fue reemplazada en 1854. En esa ocasión, los animales no se alojaron directamente en un corralillo descubierto, a la vista de los visitantes, sino que, de manera transitoria, se aislaron en una cuadra repleta de paja, desde la que, poco a poco, se les fue acostumbrando a su nuevo entorno. Todo un logro en materia de manejo de animales salvajes en cautividad, esfuerzo que se vio recompensado con el primer nacimiento de pollos de emú ocurrido en España.