Persecución directa, fragmentación de hábitat y epidemias acorralan al perro salvaje de la sabana
Licaón: la jauría africana
TEXTO: ISAAC VEGA
Fotos: WWF-Canon / Martin Harvey
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:53h
Antaño el licaón ocupaba casi toda el África subsahariana. Pero a raíz de la colonización del hombre blanco, este perro salvaje ha sido perseguido hasta el exterminio de muchas manadas por competir con ganaderos y cazadores, su hábitat se ha transformado y fragmentado y ha caído víctima de enfermedades infecciosas. Catalogado hoy en día como “En peligro” por la UICN, quedan menos de seis mil ejemplares.
Aunque algo desapercibido para la mayoría en comparación con otros animales emblemáticos de la fauna africana, el licaón (Licaon pictus) ha atraído la atención de muchos investigadores por su comportamiento social y capacidad de supervivencia. Aprecian sin duda en este magnífico corredor, campeón en resistencia, la más intensa representación de una vida errante en las inmensas sabanas. Quienes desde siempre ven corretear y cazar a este cánido salvaje en sus tierras aseguran que el mbwa mwitu (en lengua suajili) es libre como el viento; nunca se sabe cuándo llega ni cuándo se marchará.
Su primera descripción científica, a partir de un ejemplar capturado en la costa de Mozambique, fue obra del eminente zoólogo holandés Coenraad Jacob Temminck en 1820, cuatro años antes de que describiese a nuestro querido lince ibérico (Lynx pardinus).
La traducción al castellano de su nombre científico viene a ser "lobo manchado", en alusión al aspecto lobuno y al diseño del pelaje. Su pelo tan corto, unido a la robustez de su cara, armada con mandíbulas y músculos maseteros poderosos y rematada por unas orejas muy notorias, explica que algunos autores le hayan llamado "perro hiena". Su comportamiento, en cambio, recuerda al de las rehalas de podencos que se dirigen alegres y resueltas al cazadero, como indica otro de sus nombres habituales, "perro salvaje".
Recientes estudios de genética molecular confirman la adscripción del licaón a un género propio y monotípico (que sólo incluye a una especie). Se ha llegado a insinuar la existencia de subespecies diferenciadas entre los licaones del sur y del este del continente africano, aunque de momento sin evidencias científicas de ello.