Transcurridos diez años de las primeras sueltas, la población de águila pescadora en Andalucía occidental se consolida con trece territorios ocupados, incluyendo nueve parejas reproductoras. Gracias a un proyecto de reintroducción, se ha abierto un prometedor futuro en el sur ibérico para una especie que no criaba en la España peninsular desde hacía más de treinta años.
por Roberto Muriel, Miguel Ferrer, Eva Casado y Virginia Morandini
En 1982 se reproducía por última vez una pareja de águila pescadora (Pandion haliaetus) en la España continental. Ocupaba un nido en un acantilado marino de Cerro Caleta, cercano a la población de Almuñécar (Granada). Su desaparición suponía el punto final a un largo proceso de regresión acaecido durante los siglos XIX y XX como resultado de la persecución directa a la especie y la transformación del hábitat costero en el que nidificaba. En el vecino Portugal, la población existente siguió una suerte similar y en 1997 moría atrapada en una red de pesca la hembra de la última pareja, en la Costa Vicentina.
Desde entonces, el águila pescadora había permanecido extinta como reproductora en la península Ibérica. Su presencia quedó reducida a la visita estacional de una pequeña fracción de la población europea, principalmente durante el periodo invernal y los pasos migratorios.
La situación de la especie en la cuenca mediterránea y la fachada atlántica no ha variado gran cosa desde entonces, persistiendo solo en poblaciones insulares de pequeño tamaño y relativamente aisladas. Es el caso de las existentes en las islas Baleares y Canarias, que suman entre ambas unas treinta parejas (1). Por el contrario, su situación es favorable en el centro y norte de Europa, donde cuenta con poblaciones estables o en aumento desde finales del pasado siglo (2).
Hubo que esperar hasta 2009 para contemplar de nuevo a esta magnífica ave de presa reproduciéndose con éxito en territorio peninsular. Este acontecimiento tuvo lugar gracias al proyecto de reintroducción de la especie en Andalucía occidental llevado a cabo por iniciativa de la Consejería de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, bajo la dirección científica de la Estación Biológica de Doñana y la coordinación técnica de la Fundación Migres.
HemerotecaQuercus 327 (mayo 2013)Ref. 5301327 / 3’90Un águila escocesa en la ciudad de Sevilla. Roberto Muriel y Richard Thaxton.
Quercus 304 (junio 2011)Ref. 5301304 / 3’90Reintroducidas con éxito águilas imperiales y pescadoras en Andalucía. Miguel Ferrer y otros autores.
Quercus 226 (diciembre 2004)Ref. 5301226 / 3’90Sueltan en Andalucía durante 2004 27 águilas imperiales y pescadoras. Miguel Ferrer y otros autores.
Quercus 217 (marzo 2004)Ref. 5301217 / 3’90Tendidos y molestias humanas, un revés para el águila pescadora. Rafel Triay, Manuel Siverio y Beneharo Rodríguez.
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