El Palau de les Aules ha acogido el 5 de junio, Día Mundial del Medio Ambiente, la presentación de los primeros resultados extraídos tras el inicio, en 2018, del denominado "Proyecto Nutria". Se trata de una línea de investigación impulsada conjuntamente entre Global Omnium, la Fundación Limne y la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica con la estrecha colaboración de la institución provincial a través de una red de voluntariado ambiental.
El acto ha contado con la presencia de la diputada provincial de Medio Natural, María Jiménez; José Sierra, de Global Omnium; y la directora de la Fundación Limne, Sales Tomás. Los tres han destacado positivamente la recuperación de este mamífero, catalogado como especie en peligro de extinción hace apenas siete años.
"Las mejoras en los sistemas de depuración, las restauraciones del bosque de ribera y una mayor disponibilidad de alimento han permitido recuperar paulatinamente esta especie vulnerable, que hasta hace poco se encontraba restringida a pequeños reductos de la comarca de Els Ports”. Para Jiménez, estamos ante “una buena noticia que nos muestra el camino a seguir: sumar voluntades e iniciativas públicas, privadas y del tercer sector que redunden en un beneficio de los ecosistemas acuáticos".
El objetivo de este proyecto es conocer en detalle la presencia de la nutria en la Comunidad Valenciana, tanto desde la perspectiva de distribución y uso del espacio, como desde la perspectiva de la ecología de la especie, es decir, conocer su alimentación. Para ello, se han establecido puntos estratégicos de muestreo que abarcan todos los cursos fluviales y la tipología de hábitats más representativos.
Ha multiplicado por diez su presencia en las últimas dos décadas
Sales Tomás, de la Fundación Limne, ha afirmado que “se ha constatado la amplia distribución de esta especie, actualmente presente prácticamente en la mayor parte de las cuencas fluviales valencianas”, concluyendo que “en la última década la distribución de la nutria en la Comunitat se encuentra en una tendencia positiva, experimentando una expansión paulatina que se ha acelerado en el último bienio”.
Censos realizados entre 1980 y 2000 mostraron una presencia irrisoria, manteniendo sólo poblaciones estables en el río Bergantes, por su conexión con el Guadalope, afluente del Ebro. En 2005, la nutria ya apareció en 25 cuadrículas de muestreo de toda la Comunidad. En 2014, cuando se realizó el último censo por parte de la Conselleria, se localizaron restos en 58 cuadrículas. Desde entonces, según señalan los impulsores del proyecto, sus poblaciones están cogiendo mucha fuerza y, de las once cuadrículas con presencia de nutria en 1996, se ha pasado a 107. Esto es, su territorio se ha multiplicado por diez en los últimos 25 años y se ha duplicado respecto al último sondeo.
El trabajo de campo en la provincia de Castellón sigue mostrando una buena presencia en los ríos del cuadrante noroccidental (Bergantes, Cantavieja y Caldes) y destacando al Millars como uno de los ríos con mayor potencial para la conservación de la nutria en la Comunidad Valenciana, tanto por su caudal como por la calidad de sus aguas. También se han encontrado rastros en el embalse del Regajo y otras zonas del Palancia, donde parece que la nutria no es tan ocasional como se pensaba. “Castelló siempre ha sido un bastión para la nutria y, de hecho, el Millars fue el primer río en el que se detectó que ya colonizaron la desembocadura”, ha apuntado la diputada.