Por José Aguilera
Han pasado ya cinco años desde que la compañía Iberdrola completara la corrección de una de las líneas eléctricas más peligrosas para la avifauna de la provincia de Ávila, en una zona protegida por la Red Natura 2000 de la Unión Europea con la categoría de zona ZEPA: Campo Azálvaro - Pinares de Peguerinos.
Este tendido eléctrico abastece de energía a un gran vertedero, el Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de Ávila-Norte, ubicado en Urraca-Miguel.
La corrección de este tendido eléctrico supuso el punto culminante de años de seguimiento y estudio de sus afecciones a las aves, especialmente a buitres y cigüeñas. Tampoco faltaron en ese tiempo nuestras denuncias, presentadas a la administración ambiental.
Autor: José Aguilera es presidente del Colectivo Azálvaro (colectivoazalvaro@hotmail.com ), radicado en El Espinar (Segovia), desde donde coordina diversos proyectos de conservación de aves necrófagas en Castilla y León. Ejerce funciones de finalidad medioambiental como "Guarda particular del campo".