Por José Antonio Montero
El pasado 8 de noviembre pudo ser localizado el cadáver de un águila real (Aquila chrysaetos) en un coto de caza privado ubicado en el término municipal de Las Cabezas de San Juan (Sevilla), gracias a que el ave portaba un emisor GPS-GSM.
El ejemplar había sido marcado con este dispositivo en junio de 2020 en la Serranía de Ronda (Málaga). Su seguimiento se llevaba a cabo por el proyecto europeo AQUILA a-LIFE, coordinado por la asociación Grefa en colaboración con la ONG Wilder South.
El Centro de Análisis y Diagnóstico de la Fauna Silvestre de Andalucía ha detectado Carbofurano, tóxico habitualmente utilizado por los envenenadores de fauna, en las muestras de esta águila real.