Por Javier Cano Sánchez
Un joven macho de halcón peregrino (Falco peregrinus) impacta contra un Airbus Beluga XL el pasado 8 de marzo, cuando el avión realiza la maniobra de aproximación para tomar tierra sobre la pista 05 de la Base Aérea de Getafe, a una altura inferior a los trescientos metros.
El choque con la aeronave provoca la muerte del halcón al instante y el cadáver es recogido por dos funcionarios del Cuerpo de Agentes Forestales de la Comunidad de Madrid.
El ave muerta es trasladada para su depósito en el Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) de la Comunidad de Madrid, como parte de la gestión y mantenimiento de la base de datos sobre los animales recogidos que se lleva a cabo.
El ejemplar, que pertenecía a un proyecto de reintroducción de la especie en Torrejón de Ardoz (Madrid), promovido por este propio Ayuntamiento, estaba provisto de dos anillas -una de ellas de lectura a distancia- e iba equipado además con un dispositivo de seguimiento.
AUTOR
Javier Cano Sánchez (jcanos@aemet.es) es jefe de la Oficina Meteorológica de Defensa (Agencia Estatal de Meteorología).