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Seguimiento coordinado en parcelas experimentales

Finca agrícola situada en la provincia de Sevilla donde se cultivan cereales en régimen de secano. En algunas parcelas se han instalado dispositivos para excluir el agua de lluvia y simular las consecuencias de futuras sequías (foto: Marta Goberna).
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Finca agrícola situada en la provincia de Sevilla donde se cultivan cereales en régimen de secano. En algunas parcelas se han instalado dispositivos para excluir el agua de lluvia y simular las consecuencias de futuras sequías (foto: Marta Goberna).

Cómo predecir las consecuencias del cambio climático en los ecosistemas terrestres

jueves 31 de octubre de 2024, 18:37h
Casi medio centenar de experimentos tratan de revelar en España qué consecuencias tendrá la sequía y el aumento de las temperaturas en el funcionamiento de nuestros ecosistemas terrestres, particularmente en las masas forestales y las tierras de cultivo. Un esfuerzo investigador que debe coordinarse con otras iniciativas a escala europea.

Por Laura Morales, Marta Goberna, José Ignacio Querejeta, Lorena Gómez y Guillermo Gea

Entendemos por cambio climático el aumento de temperaturas registrado a escala global desde mediados del siglo XIX, un fenómeno particularmente acentuado en la Región Mediterránea desde los años ochenta del siglo pasado. El sexto informe de evaluación del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) ya advertía en 2022 que las temperaturas seguirán ascendiendo en Europa, incluso por encima del calentamiento global medio, con los consiguientes impactos negativos en los ecosistemas. Además, la Región Mediterránea es más vulnerable al cambio climático debido a su característico déficit hídrico estival, que incrementa el riesgo de deterioro de los ecosistemas. El aumento previsto en la frecuencia, duración e intensidad de las olas de calor y los periodos de sequía hará que haya un mayor riesgo de incendios forestales y también subirá la tasa de mortalidad de los árboles, reduciendo tanto su sostenibilidad como el aprovechamiento de los recursos forestales (3, 4). También se producirán cambios en la distribución y abundancia de las plantas, que favorecerán a aquellas más tolerantes a la sequía, con previsibles alteraciones en la distribución latitudinal y altitudinal de las comunidades vegetales.

AUTORES:
Laura Morales Salmerón es licenciada en Ciencias Ambientales por la Universidad Rey Juan Carlos y estudiante de doctorado en la Universidad de Sevilla. Actualmente está contratada por el Instituto de Ciencias Forestales (ICIFOR) del Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA / CSIC).
Marta Goberna Estellés es doctora en Biología por la Universidad de Valencia e investigadora en el Departamento de Medio Ambiente y Agronomía del INIA (CSIC).
José Ignacio Querejeta Mercader es doctor en Biología por la Universidad de Murcia e investigador en el Centro de Edafología y Biología Aplicada del Segura (CEBAS / CSIC).
Lorena Gómez Aparicio es doctora en Ciencias Ambientales por la Universidad de Granada e investigadora en el Instituto de Recursos Naturales y Agrobiología de Sevilla (IRNAS / CSIC).
Guillermo Gea Izquierdo es doctor Ingeniero de Montes por la Universidad Politécnica de Madrid e investigador en el Instituto de Ciencias Forestales (INIA / CSIC).

Dirección de contacto:
Laura Morales
Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA / CSIC)
laura.morales@inia.csic.es

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